Pues bueno, una vez que ya fue establecida la forma en la que terminé en las hermosas campiñas Canadienses; podemos proseguir con unas anécdotas más anecdotosas.
Resulta que, como parte del trato para que mis papás me mandaran a Toronto; Tepoz les explicó que no tendrían que pagar hospedaje, porque nos íbamos a quedar en casa de su prima, que, evidentemente vive allá.
Al principio pensé que eso significaría que nuestra diversión se vería truncada al tener a un adulto responsable en la casa todo el tiempo (porque, siendo realistas, ni Tepoz ni yo calificamos para el título de adultos responsables); pero no, en realidad las cosas funcionaron bastante bien; porque la prima trabajaba todo el día y gran parte de la noche; así que casi nunca la veíamos.
Teníamos la enorme ventaja de tener casa sola todo el tiempo, y además, refrigerador lleno. Y ni siquiera estaba lleno de cosas como vegetales, no; estaba lleno de cosas chingonas como chocolates, cortes de carne con varios centímetros de grosor, las bebidas de nuestra elección, papas, etcétera.
Caray, hasta teníamos todo el helado Häagen-Dazs que pudieramos comer. Gratis.
En fin, el caso es que la casa no estaba EN Toronto, sino en los suburbios, así que el viaje del aeropuerto a nuestro nuevo lugar de hospedaje fue un poco... venturoso.
Verán, otro detalle que debo mencionarles antes de continuar mis historias, es que Tepoz no tiene el mejor inglés del mundo. Entiende la mayoría de las cosas, y puede decir muchas; pero su acento es más que pésimo, y además se estresa después de un rato, y deja de intentar hablar en inglés con la gente, a menos que sea totalmente necesario; y pues, como yo estaba ahí, y yo sí hablo un inglés casi perfecto (sin intención de ser mamón, es la verdad), pues entonces nunca le fue totalmente necesario hablar con la gente; siempre me utilizaba a mí de traductor, y él me decía las cosas en español para que yo se las dijera a los demás.
Y como dije, se estresa fácilmente después de un rato de hablar en inglés.
Ese rato significó que para el momento en que acabó de discutir con la mujer de aduanas, estando todavía en el aeropuerto; ya estaba hasta la madre del idioma. No duró más de 10 minutos.
Entonces, a partir de ese instante, yo tuve que ejercer una doble función: por una parte, tenía que traducir lo que ese güey me decía, y por otra, tenía que elegir una mejor forma de decirlo, porque el muchacho no tiene mucho tacto; así que si yo traducía sus palabras exactas, nos hubieran deportado en menos de un día.
Retomando.
Saliendo del aeropuerto, decidimos tomar un taxi hasta la casa; pero el hindú que conducía, nos dijo que iba a cobrarnos 60 dólares; así que lo mandamos al demonio, en español, mientras él nos insultaba en hindú. Digo, estoy bastante seguro de que eran insultos, por la forma en que nos gritaba.
"¡Al carajo! Si puedo usar el transporte público en México, también puedo hacerlo en Canadá", pensé.
Y en realidad sí pude, y no fue tan difícil; pero sí nos tomó como 3 horas llegar hasta la casa.
Ni siquiera fue tan malo, excepto la parte en la que íbamos en el camión, y un hindú (ahá, otro) que estaba sentado junto a mí, empezó a quedarse dormido y a cabecear. Sobre mi hombro.
Yo nada más lo veía de reojo, y me daba cuenta de que poco a poco su cabeza se acercaba más y más a recargarse sobre mí.
Después de como 20 minutos de este lento proceso, en el que además, Tepoz se cagaba de risa de mi situación; la cabeza del hindú por fin tocó mi hombro.
A pesar de que yo veía venir esto desde hacía mucho; me asusté un poco, y me paré gritando "Dude, what the FUCK?!"
El hindú se asustó, se disculpó, y se bajó del camión. Y creo que eso me hizo ver como una persona sumamente intolerante, porque la demás gente del camión se me quedó viendo feo. Incluyendo un chino culero, que, para mi desgracia, era uno de los 120 millones de chinos culeros que había en Toronto.
Ya, llegamos a la casa, llenos de energía y dispuestos a aprovechar nuestro primer día en Canadá, digo, apenas eran las 3 de la tarde, teníamos todo el día por delante.
Nos sentamos en la sala a reposar los pies un rato, y nos quedamos profundamente dormidos.
Todo el viaje nos había cansado mucho, yo creo. Además, yo estaba crudo.
La historia de cómo me encontraba en Coyoacán, bebiendo Viña Real y viendo a mis amigos vomitar en cubetas con facciones humanas, 2 horas antes de tener que irme al aeropuerto, es otra historia completamente diferente; y merece ser contada en un post aparte.
Sólo diré que alguien vomitó en mis zapatos al final de la noche, y no hubo tiempo de lavarlos antes del viaje; así que los metí en una maceta para que la tierra hiciera que dejaran de apestar, y me los llevé puestos a Toronto.
En fin, de regreso en el primer mundo: despertamos a las 9 de la noche, y nos dimos cuenta de que ya habíamos perdido el primer día, así que nada más nos dedicamos a caminar por los alrededores, para aprovechar que en Canadá no tienes miedo de que te asalten y te violen si sales a pasear en la noche.
Como a la medianoche, cuando ya no había NADA que hacer (porque Canadá cierra a las 11), regresamos a la casa.
Cuando ya estábamos a unas cuantas cuadras, pude percibir un aroma sumamente familiar: petate quemado.
Digo familiar porque Lawndale siempre apesta a marihuana, no crean que yo soy un perversito.
Voltée y le dije a Tepoz: "Carajo, huele a hippie...". Buscamos la fuente del olor, y a unos pocos pasos vimos a dos mujeres, riendo alegremente, y fumando más alegremente todavía.
Meh, nada fuera de lo común.
Seguimos caminando, y notamos que estas 2 chicas caminaban atrás de nosotros. Me salió lo chilango y pensé que nos querían matar y robarse nuestros riñones; pero Tepoz me aseguró que eso no pasaba en la gloriosa tierra del castor.
Pero seguíamos caminando, y ellas nos seguían siguiendo (redundancia, much?); hasta que en la cuadra donde estaba nuestra casa, yo no pude aguantar más; así que me voltée, caminé hacia ellas y les dije; en inglés, obviamente: "Ok, ¿como por qué nos vienen siguiendo?", ellas se voltearon a ver y me dijeron: "México, ¿verdad?"; confundido, asentí, un poco avergonzado de que mi acento fuera tan notorio.
Me dijeron que no nos estaban siguiendo, que simplemente ellas vivían en esa cuadra. Les mencioné que nosotros también, y llamé a Tepoz, para que se presentara y para que no me dejara solo, porque seguía teniendo un poco de miedo.
Se llamaban Allison y Rebeca, y eran nuestras vecinas de 19 y 17 años, respectivamente.
Y bueno... toda esa ni siquiera era la anécdota que quería contarles el día de hoy... así que ignórenla.
Lo que acaban de leer fue algo así como el prólogo parte dos; pero si no se los contaba, no iban a comprender bien bien las anécdotas que siguen.
Ahora sí, la anécdota canadiense del día:
Llevábamos ya una semana y media de vivir en nuestra bonita casa suburbana, y un día, acabando de cenar, llegó la prima de Tepoz; y yo le agradecí toda la comida gratis que estaba proporcionándonos. La conversación fue algo así:
Yo (inglés):
Muchas gracias por todo, en serio. Si podemos hacer algo para ayudar en la casa, por favor avísanos.
Tepoz (español):
¡No! ¡No seas idiota! ¡No ofrezcas ayudar!
(es importante mencionar que la prima no entendía NADA de español, porque llevaba toda su vida viviendo en Canadá)
Yo (español):
Es pura educación, animal. Además no creo que nos diga que hagamos algo.
Prima (inglés):
Pues, en realidad quería pintar el baño de arriba desde hace mucho, y no podía hacerlo porque no tengo tiempo, ¿creen que ustedes podrían pintarlo?
Tepoz (español):
¿Qué está diciendo? Dime que no la cagaste...
Yo: (inglés):
Sí, no hay problema. Cuando tú quieras.
Tepoz (español):
¿Qué pasa? ¡Dime! ¿Qué estás diciendo?
Prima (inglés):
¡Perfecto! ¿Mañana en la mañana podrían?
Tepoz (español):
¡No! ¡Dile que no! ¡No sé que esté pasando pero tú dile que no!
Yo (inglés):
Sí, perfecto.
Tepoz (español):
¡No! ¡Eres un idiota! ¿Qué acabas de decir que vamos a hacer?
Yo (español):
Pintar el baño, mañana.
Tepoz (español):
¡Puta madre! ¡Ya sabía yo que me ibas a embarrar en tus pedos! ¡Te odio!
Yo (español):
Relájate, no creo que nos haga pintar su baño. Fue pura hablada.
Al otro día, como todas las mañanas, nuestro despertador sonó. Y como todas las mañanas, me levanté a apagarlo y regresé a dormir. El problema fue que en cuanto nuestro despertador sonó, la prima asumió que ya ibamos a despertar; y tocó en la puerta. Balbucée algo, y ella me dijo que bajáramos cuando pudiéramos.
Le dije a Tepoz que su prima acababa de decir que tenía que bajar a ver una cosa; y mi amigo bajó, arrastrando los pies.
A los tres minutos, me volví a despertar, esta vez por un grito de: "¡DEXTEEEEEEEEER!"
Bajé, arrastrando los pies yo también; y me encontré con Tepoz sumamente enojado, que me dijo: "Ve a ver lo que provocaste pendejo, mi prima está en la cocina".
Fui a la cocina, seguido por Tepoz; y la prima estaba ahí, muy sonriente, con dos botes de pintura.
De nuevo, la conversación fue más o menos así:
Prima (inglés):
Les conseguí la pintura, ¿creen que podrían empezar a pintar al ratito?
Tepoz (español):
¡No mames! ¡Ni siquiera compró brochas, ni rodillos!, ¿con qué espera que pintemos?, ¿con las nalgas?
Yo (inglés):
Sí, no veo por qué no. Pero no tenemos brochas...
Prima (inglés):
Pues pueden ir a la tlapalería, está aquí a dos cuadras.
Yo (español):
Dice que vayamos a la tlapalería güey, que está aquí en corto.
Tepoz (español):
¡No, ni madres! ¡Ahora pintamos con las nalgas!
Yo (inglés):
No sabemos llegar.
Prima (inglés):
Bueno, ahorita voy yo. Vuelvo en 15 minutos.
Tepoz (español):
A huevo, nada más ve a dos mexicanos y quiere que le pinten su baño. Eso es racismo, por eso lo vamos a pintar con las nalgas.
Yo (español):
Ya cállate güey...
Mientras la prima conseguía los insumos, nosotros desayunamos; y yo me puse mis pantalones de pijama de ositos, y una camiseta que saqué de la maleta de Tepoz sin que se diera cuenta.
El fin de semana pasado nos habían hecho pintar una cabaña (de nuevo, otra anécdota diferente); y yo había manchado mis pantalones nuevos, así que no iba a cometer el mismo error dos veces. No en el mismo viaje, al menos.
A la media hora, ya estábamos pegando periódico en el suelo y en el techo para no pintar de más; y de nuevo, surgió otra conversación (ahora, toda en español):
Tepoz:
Si me hubieras hecho caso y le hubieras dicho que no, ahorita podríamos estar en el lago Ontario.
Yo:
Ahá. Toda la culpa es mía.
Tepoz:
Sí, y como siempre, yo acabé embarrado en tus pendejadas.
Yo:
Vete al diablo, no teníamos nada mejor que hacer hoy y lo sabes.
Tepoz:
¿Sabes? Leí en algún lado que aquí en Canadá pagan 18 dólares la hora por hacer este tipo de cosas.
Yo:
No es cierto.
Tepoz:
Sí, en serio, pagan un chingo.
Yo:
Sí, eso tal vez sí sea cierto; pero no lo leíste en ningún lado, lo estás inventando.
Tepoz:
... ¿sabes qué sería bueno?, hacerle como en ese cuento de Moby Dick.
Yo:
... ¿y matar a una ballena?
Tepoz:
No seas pendejo, ¡Moby Dick!, donde el tipo convence a sus amigos de que pintar la barda es divertido y les cobra por hacerlo.
Yo:
... ¡ese es Tom Sawyer, estúpido!
Tepoz:
Bueno, como sea, deberíamos de convencer a alguien de que pinte el baño por nosotros y cobrarle por hacerlo. 18 dólares la hora.
Yo:
Creo que entre todas las pendejadas que acabas de decir, esa es la menos pendeja. Tengo una idea. Vuelvo en un parpadeo.
Tepoz:
¡Chinga a tu madre!, ¡ya sabía que me ibas a hacer pintar el baño a mi solo!, ¡me cagas!
Y así, con un brillante plan en la cabeza; salí corriendo de la casa (en pijama, además) y llegué a la casa de las vecinas, Allison y Rebeca.
Ellas, como nosotros, tenían casa sola casi todo el tiempo, porque sus papás trabajaban; así que yo estaba seguro de que no tenían mucho que hacer.
Yo:
¡Hey!
Allison:
¡Hola!, ¿qué pasa, por qué vienes en pijama?
Yo:
Es que Tepoz y yo estábamos pensando que tal vez les interesaría hacer algo muy... mexicano.
Allison:
¿Qué?
Yo:
Pues es algo que miles de mexicanos hacen todo el tiempo, sobre todo en Estados Unidos, pero de todos modos es muy mexicano.
Allison:
¿Qué es?
Yo:
¡Una sorpresa! ¿Les interesa?
Allison:
Pues sí, suena divertido.
Yo:
¡Perfecto! Las vemos en la casa en 10 minutos, lleven ropa cómoda.
Y así, conseguí suficiente ayuda como para compensar el hecho de que yo jamás en mi vida había pintado un baño, y era pésimo haciéndolo.
El gran problema fue que a las vecinas no les hizo mucha gracia la idea, y se sintieron un poco engañadas; pero eso les pasa por ser canadienses y confiar en la gente. Supongo que mi plan no les gustó mucho. Fuck them.
El otro gran problema fue que yo me aburrí muy rápido, y empecé a echar desmadre; así que en una demostración de mis poderes jedi, le di un brochazo en la cara a Tepoz.
Y sí, Tepoz es mi mejor amigo, y lo conozco desde que teníamos 6 años; y normalmente el güey me tiene MUCHA paciencia, pero a veces hago cosas como esta, y la paciencia vale madres.
Otra cosa que deben de saber, es que Tepoz es de esos tipos todos altos y fuertes (de hecho, lleva 6 años yendo diario al gimnasio), sus biceps son del tamaño de mi torso, y además ha tomado un chingo de clases de todo tipo de artes marciales, así que nunca me he podido defender ante él.
Con la cara llena de pintura, se acercó todo enojado, mientras las vecinas se reían y yo sabía que algo malo iba a pasar.
Me agarró del cuello, me alzó, me puso de cabeza, y me tomó por los pies, como rábano. Lo siguiente que recuerdo es que alguien estaba sumergiendo mi cabeza en un bote de pintura color arena.
Fue entonces cuando eduqué a las vecinas en una clase intensiva de groserías y vulgaridades del idioma castellano.
Mientras todos acababan de pintar el baño, que por cierto, terminó pareciendo pintado con las nalgas; yo bajé a la cocina a tratar de limpiarme.
Y fue en ese momento en que decidí llamar a mi casa; y mi mamá escuchó una de las frases más extrañas que he dicho:
"Mamá, situación hipotética: si hipotéticamente tuviera pintura en los ojos y en el pelo, ¿cómo me la podría quitar? hipotéticamente, claro..."
26 comentarios:
hipoteticamente claro... primero ¿pintura base agua o base aceite? base agua facil, te bañas; base aceite... estas en problemas ¿conoces el thiner?.
Jajajajajajaja, pero q cagado, terminaste haciendo trabajo de mojado durante tus vacaciones... ¿ves? los padres siempre saben q no importa cuanto se esfuerce uno en langarear, alguien siempre termina haciendo trabajar de a grapa.
Pero fue justo, comida y hospedaje gratis por un mes a cambio de pintar un baño de color arena (y terminar como modelo de tienda de pinturas)
De aceite... pasé 3 días pareciando joto con rayitos en el pelo...
Pues sí, la verdad hasta pintar toda la casa hubiera valida la pena, el viaje no tuvo madre.
Y también cociné y lavé trastes...
chaleeeee ya van 2 veces que voy a centro coyoacan ¡quiero irme a canadá!
Jajaja estás agarrando peregrinación diaria?
Te digo que la bendición canadiense sólo funciona en verano!
Ahorita ni quieres irte; sería ir a sufrir temperaturas inhumanamente heladas.
Coño! ¿Porque eres un escuincle? Podría irme al DF y darte una buena lección de vida.
Oye! Yo ando pensando remodelar mi cuarto, me gustaría que las paredes fueran como color turquesa. Va a estar bien divertido! A cambio te ofrezco hospedaje y comida gratis en la casa.
Es un buen y divertido trato, y lo sabes.
Moby Dick...
Creo que van a tener que ser muchas más que cinco entradas.
jajajjajajjajajajajajjajajaj
Me pregunto que se sentira pintar un bano con las nalgas... me imagino que seria un bonito disenio :P
Muy divertida esta segunda anecdota...vamos por mas...
Pat: Tecnicamente soy mayor de edad, eso me hace legal ^_^
Las lecciones de vida son bienvenidas.
Andie: Contrátese bajo su propio riesgo. Luego no te andes quejando cuando tu cuarto huela a nalga.
Silvestre: Si Dios nos sonríe, como seis o siete.
Yohana: Muy circular y simétrico jaja
Jajajajajaja...
Moby Dick... Tom Sawyer... me acordé del "amigo" del que hablé en mi blog, la última vez que fuimos al centro de Coyoacán me dijo que la fuente era de LOBOS... LOBOS!
Pero no, tu amigo el Tepoz no ha alcanzado ese nivel de "Open Mine" y "votas". NO LO DEJES!!!
No lo dejaré.
Me sentiría personalmente ofendido si dijera algo así...
jajajajaja es que acaso puede haber alguna vez en que no tengas aventuras??? jajaja me encanta como escribes!!
No, no puede. Soy demasiado sensual como para ser aburrido.
Tambien eres demasiado sensual como para no conocer extranjeras a donde quiera que vayas, conciertos, el extranjero...
Jajaja.
No se!!! quiero saber que pasa despues, quiero fotos!!!
Eso si que ayudaria debiste tomar muchas fotos y si no, que sensualmente tonto eres. En el sentido mas sensual de la palabra.
Lo demando como fans!!!
^^
Técnicamente no conocí extranjeras, conocí locales.
Yo era el extranjero.
Y sí, tomé muchas fotos. Hay un album en mi hi5 dedicado a eso precisamente.
Si realmente fueras fan, lo sabrían.
Lo demando como rockstar.
Tecnicamente soy fan de tu blog.
No tuya.
HAHAHAHA awww
no es verdad.
Esta bien, falle.
Pero deberias poner fotos de todos modos.
Oíste ese crack?
Es mi corazoncito rompiéndose...
Estaba dando la vuelta por este vasto mundo del internet, cuando di con tu blog, y me gustó mucho, me la pase toda la tarde viendo varias de tus entradas y ahora tienes una nueva seguidora, jajajaja.
Mañana seguire leyendo tu blog, no me canso, un saludo y pues yo tambien quiero ir a Canadá no importa que tenga que pintar, es más hasta lavar coches, jajajaja
Yeah!
Nunca se tienen suficientes seguidores morados.
jaja fuè muy cagado imaginarte con rayitos como de gai de la mercedes.
Yo tenìa un amigo asì bien mamey en la secundaria, era cholo hommie y me defendìa de los abusadores porque yo solìa ser un pequeño ser humano flacucho y pandroso, y en las escuelas fresas esos no son precisamente un hit.
Flaquito y pandroso... creo que nos parecemos bastante...
Ah que tal con las fans?
Yo quiero ser presidenta, si es que hay un club...
Espero con ansias la tercera parte, en donde ustedes y la muchachitas hacen de las suyas.. relajadamente fumando mariguana
Pat: Ya hay algo así como un club de fans; y sí, tu puedes ser la presidenta. Pero eso implica hacer mítines y newsletters y todo eso.
Es mejor ser fan normal.
Orlando: Al ratito ya voy a escribir la tercera parte. Lamentablemente, no hay marihuana.
Jajajaja definitivamente tu vida es todo, menos aburrida!!! XD, mira que cosas como las que tu pasaste por allá no cualquiera xD, estuvo genial aquello de terminar con la pintura =p. Ni modo, son tan solo gajes del oficio xD pero deberías de mostrar fotitoooooos! así enriqueces nuestra imaginación xD
Pero he dicho tantas veces que soy sensual, que si enseño fotos rompo la ilusión...
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