Queridos lectores imaginarios:
El día de hoy no pensaba escribir, pero acabo de llegar a mi casa, y tengo las manos estúpidamente frías (a pesar de que traigo guantes puestos); así que pensé que a lo mejor si escribía; la circulación regresaba a mis dedos.
Hasta ahora, ha sido una pésima idea, porque los dígitos fríos sólo hacen que me vuelva más torpe, así que llevo como treinta dedazos en el teclado, lo cual ocasiona que apriete teclas de más, y tenga que corregir. Supongo que me tardaré más que de costumbre. Oh well.
En fin, la historia que les contaré el día de hoy, tuvo lugar hace unas cuantas semanas.
Todo empezó cuando yo estaba saliendo de Lawndale, y en la puerta me encontré a un amigo, que curiosamente también resulta ser mi maestro de batería.
Como no teníamos mucho que hacer, fuimos a la cafetería, donde procedimos a sentarnos en una mesa, y ponernos a hablar de música.
Mientras los minutos pasaban, fueron llegando más amigos, y la plática se puso interesante.
Lamentablemente, por culpa de una acalorada discusión acerca de la relevancia de Stuart Braithwaite en el rock escocés; se me fue la noción del tiempo; y olvidé que yo tenía que ir a una tienda de música que estaba ahí cerca; porque tenía que comprarme un atril para micrófono que necesitaba con urgencia.
Me despedí de todos, y me levanté de la mesa.
"No, aguanta, te acompaño; de todos modos no hay nadie en mi casa, entonces no hay nada para comer", me dijo mi maestro de batería, al que a partir de ahora llamaremos Pantalonescaídos.
Caminábamos nosotros hacia nuestro destino, cuando nos topamos con un puesto de tacos.
"¡Uy, tacos!", dijo Pantalonescaídos. "¿Me aguantas? De una vez como, y después ya vamos a tu tienda".
"Chido", contesté.
Una vez que nuestra parada culinaria llegó a su fin, seguimos caminando.
5 ó 6 cuadras después, encontraríamos la tienda de música.
Me acerqué al dependiente, y le dije "Buenas tardes, jóven. ¿Podría mostrarme su mejor y más barato atril?"
Viéndonos con cara de estos niños me están haciendo perder el tiempo, la persona detrás del mostrador me señaló un atril todo pitero.
"Me gusta. Me lo llevo. ¿Cuánto quiere por él?", le dije.
"250 pesos", me contestó.
Voltée a ver a Pantalonescaídos, y le dije "Vaya, creo que debería de haber traído dinero, ¿verdad?"
"¿No te alcanza, pendejo?", me dijo mi amigo.
"No. Pero no importa. ¿Acepta tarjeta?", le pregunté al encargado de la tienda.
"Sí", dijo.
"¡Qué bien! No tengo tarjeta", le contesté, y me le quedé viendo con cara de inocencia.
Viendo la cara de hastío del empleado, decidimos que salir de ahí era la mejor idea.
Una vez afuera, conté mi efectivo.
Juntando los pocos billetes que tenía, con mi enorme cantidad de morralla, llegaba a juntar 169 pesos.
"Fuck that, de todos modos estaba carísimo, mejor vamos al centro, ahí las cosas están mucho más baratas", me dijo Pantalonescaídos.
"Va, chingón. ¿Cuándo vamos?", le pregunté.
"Pues... ahorita tengo tiempo libre, ¿y tú?", contestó.
Fue entonces cuando decidimos que en ese mismo momento, iríamos a la calle de Bolivar, donde venden todo tipo de cosas musicales.
Good thing too, porque en serio me urgía ese atril.
Después de mucha caminada y un par de transbordos, llegamos a nuestro destino.
Empezamos a entrar a las tiendas de música, y descubrimos que de todos modos, no me alcanzaba para ningún atril.
Los más MÁS baratos, oscilaban entre los 180 y los 200 pesos. Ligeramente arriba de mi presupuesto.
Pasamos las siguientes dos horas recorriendo todas las tiendas de música que hay en el centro, tratando de encontrar una donde mi presupuesto me alcanzara.
Después de unos cuantos intentos fallidos, le dije a Pantalonescaídos "¡Ya! ¡Al carajo, préstame dinero y te lo pago al ratito que pasemos por mi casa!"
Me vió con cara triste, y vació sus bolsillos. Traía tres pesos con cincuenta centavos.
"¿Te acuerdas de los tacos que me compré hace rato?, ese era todo mi dinero", me dijo.
Después de transportes y todo lo demás, y juntando absolutamente TODO el dinero que traíamos, juntábamos $168.50
Lanzando un suspiro de resignación, continuamos caminando.
En una de esas, un tipo se me acerca y me dice "Oye, tú, güerito, ¿sabes dónde queda la calle de nomeacuerdo?"
Pantalonescaídos se empezó a reír, y siguió caminando.
"No, ni idea, perdón", le dije al tipo.
"Ah, lo que pasa es que la estaba buscando y pues... creo que es por aquí, ¿no?"
"En serio, no tengo idea, ja", le contesté.
Pantalonescaídos seguía riéndose.
"Ah bueno. Yo doy clases de guitarra, ¿sabías?", me dijo.
Lo vi extrañado y le dije "Sí, se ve. Digo... con esa guitarra imaginaria que traes cargando..."
"Ah, es que no la tengo aquí, la tengo en donde doy clases, a unas cuadras de aquí, ¿quieren ir?", contesó.
Me lo quedé viendo todavía más extrañado, y en eso Pantalonescaídos se acercó y le dijo "No gracias, somos batacos, ya nos vamos, bye", y me jaló del brazo.
Después me explicaría que el tipo me veía lascivamente, y me estaba tratando de ligar.
Juro por Alláh que yo nunca me di cuenta.
No sé por qué los gays me encuentran tan atractivo, pero en serio, parece como si fuera un dulce caramelo para ellos.
En fin.
Después de caminar horas y horas, decidimos mandarlo todo al diablo, y regresar a casa, derrotados.
De camino al metro, vimos una última tienda, toda rascuacha.
"Al carajo, dije, última oportunidad", y entré.
"¿Cuánto por su atril más barato?"
"200 pesos", me dijeron, y me señalaron un atril pitero.
Lo inspeccioné, y me di cuenta de que tenía una pequeña abolladura.
"¿200 pesos? ¡Pero checa, está toda madreada!", argumenté.
El empleado fue a verla, y me dijo "Ah bueno, era 200 este tipo de modelo, pero si te quieres llevar ésta, entonces 185, porque sí esta un poco abollada"
"Te ofrezco 168.50", dije, con el dinero en la mano.
El empleado se rió de mí, y se me quedó viendo. "Ok, 175, me dijo"
"168.50", le volví a decir. "Es todo el dinero que tengo carnal. En serio. Es más, ni siquiera sé cómo me voy a regresar a mi casa."
Me vió con un poco de lástima, y me dijo "170 pesos y es tuyo".
"168.50", le repetí.
Viendo mi cara triste, el empleado se compadeció, y me dijo que ya, que fuera a pagar en caja.
Cuando llegué, me cobraron 170 pesos.
"Un momento", le dije a la cajera, y regresé con el empleado, explicándole mi situación.
A final de cuentas, el empleado sacó su cartera y me prestó 5 pesos.
1.50 para el atril, y 3.50 para que me pudiera regresar a mi casa.
No sé por qué les conté eso, lectores imaginarios.
Tal vez porque me hizo gracia el hecho de que un empleado que gana salario mínimo me haya tenido que prestar dinero.
Sea como sea, mis manos siguen heladas, así que me retiro.
Estúpido frío.
37 comentarios:
Que raro que te haya prestado dinero.. todos los empleados que he visto siempre tienen arena en la vagina.
Excepto una en un Seven Eleven, esa mujer era muy pinche feliz y no lo entiendo porque no debe ser feliz el trabajar en ese lugar a las 4am.
Todos tenían arena en la vagina.
Sólo ese no, a lo mejor le di lástima, o le hice gracia.
La del Seven seguro estaba ebria o drogada. Eso lo explicaría, ¿no?
Lo del "préstamo" supongo que es una especie de señal divina para no perder la esperanza en la humanidad!.
También llamó mi atención el potencial del comercial 2010 de "Ojo, Mucho Ojo": (hola guapo) Doy clases de guitarra (!)... te enseñaría a tocarla (!) pero no la traigo conmigo... podemos ir al lugar dónde doy las clases para que te de una pequeña demostración (!!!!)
Los ojos verdes desgarradores pueden ser un arma de dos filos u__u
Tengo que aprender a controlar mi sex appeal.
Tienes que aprender a llevar más dinero ¬¬
Mejor tengo que conseguir un trabajo.
jaja un dulce caramelo...es verdad que extraño que el empleado te haya prestado dinero ._.
Fueron sólo 5 pesos, no es tan raro, ¿o sí?
te iba a preguntar que es bataco pero ya se ^^
bueno si es verdad 5 pesos no es mucho pero aun asi era un empleado que gana poco no lo va a gastar con alguien que ni conoce no?
A lo mejor mi pobreza y patetismo le hizo gracia...
¿No has pensado que el empleado tal vez también trató de ligarte? Por 5 pesos era un intento bastante fácil. Picaron.
Esas cosas no me pasaban hace muchísimo ninja peruano, cuando vivía en Breña y compraba cuerdas en dos de mayo. Por eso, saaabiamente, ahora chambeo.
Te quieren ligar porque a lo mejor eres bonito y tu lado femenino reluce mucho...
Yo que se...
Bien por ti, y porque aun hay almas caritativas que hasta tu casa te hacen llegar con todo y atril...
JAJAJAJAJA
Se hubiera escuchado mas alburero-sexoso-lascivo-degenerado si te dijera ese wey
"doy clases de bajo" x'DDDDD
ah que buena onda por lo de tu atril, yo extraño tocar la bateria =/
en fin...
Te mando saludos man! y aguas con el bajo =P
Muchas veces me ha pasado eso de no tener dinero, pero el hecho de trabajar es tan... tan... ajeno a mi, que prefiero seguir de mantenida al menos hasta que termine mi carrera.
Quizás si te vas al estudio el "profesor de guitarra" te hubiese dado un atril, no crees? Hay que sacar provecho de tu sensualidad.
Me caga eso!! sales con la mentalidad de que tienes dinero "suficiente" y a la mera hora, la chingadera que uno quiere comprar, es mucho más costosa de lo que parece...
Ok... en verdad hay que conseguir un trabajo...
Me recordo a cuando queria hacerme mi primera perforación y llevaba 50 pesos, al final pidiendo dinero en Coyoacan fingiendo asalto y freses extrema, pudimos conseguir $350, y cuando entramos al local perforador uno de los estafados nos vio feo y nos pidio sus $5 de regreso, pero de todos modos me la hice, y me la quite cuando llegue a mi casa porque tenia 13 años y estaba asustada.
Como sea, no es tan raro que hayas encantado al vendedor...
Ahhh, es genial.
Pero es más genial cuando te piden dinero con cara de El-niño-quiere-un-algodón-de-azúcar-mírele-la-carita y a fin de cuentas terminan regresándote el dinero que te pidieron por que resultó que el escuinclito tenía más dinero de lo contado en la mano. A mi que el desgraciadito lo robó.
Aguas con las homo-violaciones. Pero triste tú que pareces gay.
En fin, ya tienes atril.
Que penaaaaa!!!!!!! Yo no podría, no no, ni pedir prestado ni aceptar el dinero del empleado, me habría puesto súper roja instantaneamente y habría salido corriendo de la pena...
wow, te admiro O_O
bueno no, en realidad no....
Saludos!!!
jajajaja que cosas tan raras te pasan, que bueno que ninga me a tratado de ligar una lesbiana, y mi amigo gay dice el solo le tira la onda a los tippos que se nota a huevo que son gays para evitar ese tipo de mal entendidos, asi que o te ves muy gay o le gustaste mucho al tipo y se dijo no pierdo nada intentando.
y si que trsite que el de la tienda te presto dinero, es lindo saber que aun queda gente bna en el mundo
jajajaja que cosas tan raras te pasan, que bueno que ninga me a tratado de ligar una lesbiana, y mi amigo gay dice el solo le tira la onda a los tippos que se nota a huevo que son gays para evitar ese tipo de mal entendidos, asi que o te ves muy gay o le gustaste mucho al tipo y se dijo no pierdo nada intentando.
y si que trsite que el de la tienda te presto dinero, es lindo saber que aun queda gente bna en el mundo
por que nececitabas el atril ese con tanta desesperacion?
van
p.d. perdon por repeir el coemntario soy inhabil y puse publicar sin querer la vez pasada
No quisiera quemarte enfrente de tus lectores, pero qué diablos: ahora que vi tu feisbuc tengo la respuesta de por qué eres tan atractivo a los gays: por tu inconfundible pose caramelo-emo. Les resultas irresistible, chiquitín.
BTW, los empleados de Bolívar si son buena gente. Yo he ido a comprar guitarras, y una vez un tipo me dijo que si quería me daba clases y... wait.
Anónimo, que creo que eres Anónima, hoy es tu día de suerte ;-).
Ah,si, Ninja, yo también tengo los dedos helados, pinche frío... Y como ya has dicho, cuesta mucho trabajo escribir así. Como sea, lo que quería era dejarte un mensajito para que pienses en mi aunque sea 2 segundos en lo que lo lees, me hace sentirme importante :).
Hey al menos tienes pegue!...wrong lane...pero pegue!
Deberia haber un Hogwarts para ojos verdes, para aprender a controlarlos, como la magia, no vaya siendo que te terminen enseñando su atril.
Que pinche soné
No eres el único que tiene pegue con los gays. De hecho a mi una vez un sujeto me tiró la onda gachamente en el Veerkamp (curiosamente en una tienda de música igual que tú) que está cerca de mi casa, nunca me di cuenta hasta que luego de 10 minutos de mundana plática me pregunto directamente que si queria tener sexo con él...
Jamás regresé a ese Veerkamp.
Saludos grandísimo homosexual.
Ja, yo fui a ese Veerkamp hace unos días.
Nada pasó.
Me encanta ir al centro pero solo, así puedo pasar horas pegándole a los platillos y preguntando cuanto cuestan las cosas.
Que buen pedo de vendedor.
Malditos homosexuales.
Sólo lo dices porque no te ofrecieron queso.
JAJAJAJAJAJAJAJAJA
Touché
Rock on!
Amo esos días cuando lo mejor viene de gente desconocida en lugares inimaginados.
Por otro lado, en serio, viejo ¿Qué demonios tienen los homosexuales contigo?
Eso quisiera yo saber, créeme.
Consejo sabio de una amiga imaginaria no tan sabia: Los gays son un buen termómetro mi ninja, generalmente tienen buen gusto, y eso se extiende a tooodas las áreas: desde los outfits ultra chic hasta que siempre les gustan los guapos.
Hey dude. Tiene mil años que no comentaba ningún post. Disculpa por ello. Ehmm, qué wey, si no tienes dinero y estás en el centro: pide dinero. Es muy fácil, si yo paseara por el centro y tú me pidieras dinero, te lo prestaba.
¿O no? No ¬¬ Ahora, el pobre empleado, lo hizo con buenas intenciones, sino fue así, aprovecha tu pegue con los homosexuales jaja :3
Un saludo ^^
La verdad es que a tí si te pasan cosas dificiles de creer. Lo de homo ligandote me parece normal, pero un empleado que te preste dinero... a propósito ¿ya le pagaste?
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