lunes, 30 de mayo de 2011

De corazones rotos

En la vida, todos conocemos a personas que por una u otra razón nos definen.
Personas con las que compartimos experiencias, y sueños, y anhelos, y miedos, y cuentos; y al final del día, nos conocen.
Nos conocen mejor de lo que nos conocemos a nosotros mismos.

Esas personas se vuelven tremendamente importantes en nuestras vidas, porque el simple hecho de estar con ellas nos recuerda quiénes somos, qué nos gusta, cuáles son nuestras fortalezas y debilidades.
Gracias a ellos podemos enfrentar la vida, día con día.

El problema viene cuando esas personas se van.

Cuando una persona que nos conoce mejor de lo que nos conocemos a nosotros mismos se va, se lleva con ella un pedazo de nosotros.
Un pedazo que se va para siempre, y que nunca vamos a poder recuperar.

Se muere una pequeña parte de nosotros, y nos sentimos incompletos.
Éso es lo que la mayoría de la gente llama "un corazón roto"

¿Qué pasa cuando una persona que nos define nos deja solos?
Pasa que de pronto, ya no sabemos ni siquiera quiénes somos.
Nos desconocemos de repente.

Por eso cuando una persona pierde a un ser amado, empieza a actuar en forma rara.
Prueba cambios de look radicales, intenta hacer cosas que nunca antes había hecho, se mete a clases de cosas que nunca antes le interesaron y trata de vivir experiencias diferentes a todas las que antes había probado.
Hace todo eso para tratar de encontrarse a sí misma.

Para tratar de llenar ese pequeño espacio que ha quedado vacío.
Ese espacio que nunca va a volver a llenarse realmente.

Tal vez nuevas personas lleguen, y tal vez se conviertan en personas que nos definan, y que con el tiempo también lleguen a conocernos mejor que nosotros mismos.
Tal vez nos regalen nuevos pedazos de corazón, con los cuales trataremos de parchar las heridas que el tiempo y la vida nos van dejando.

Pero en el fondo, sabemos que un corazón que ha sido roto, realmente roto; nunca va a estar completo de nuevo.
Simplemente tenemos que encontrar la forma de hacer que funcione de nuevo, a pesar de las grietas.

Esas grietas que dejaron las personas que se fueron.
Esas grietas que hacen que nos desconozcamos a nosotros mismos, porque las personas que podían decirnos quiénes somos ya no están con nosotros.

sábado, 28 de mayo de 2011

Siempre es lo mismo

He notado un cierto patrón de conducta en los mexicanos.

Cuando hace frío, aunque sea un poquito, TODOS se quejan del frío, reparten mentadas de madre, gritan a los cuatro vientos que ya quieren que termine la época de frío, que quisieran un poco de Sol, que es inhumano vivir con clima así, etcétera etcétera.

Después, cuando hace calor, aunque sea un poquito, TODOS se quejan del calor, reparten mentadas de madre, gritan a los cuatro vientos que ya quieren que termine la época de calor, que quisieran un poco de airecito, que es inhumano vivir con un clima así, etcétera etcétera.

Y eso que estamos en México, en donde "frío" significa estar a cero grados (a lo mucho) y "calor" es estar a 30.
Nos quejamos a pesar de tener un clima bien chingón.

En Canadá, sólo se quejan del frío cuando están a -30 grados. Lo pondré en letra por si no lo captaron del todo:
Menos treinta grados.

¿Saben cuánto es eso?
No, por supuesto que no lo saben, porque nadie en este país puede comprender un frío así de cabrón; y bien por eso, porque la verdad no quisiera tener que experimentarlo.

En Australia, se quejan del calor cuando están a 45 grados o más.
Cuarenta. Y. Cinco. Grados. O. Más.

Y aparte es un calor tremendamente húmedo, lo cual hace que la sensación térmica sea mucho más alta de lo que realmente es.

ÉSOS son climas culeros.

Los canadienses y australianos SÍ tienen derecho a quejarse del clima, y a hacer pésimos chistes por twitter.

Nosotros no. Nosotros no podemos estar de maricas cuando tenemos un clima tan chingón.

Si quieren quejarse de algo, quéjense de la estupidez de la gente.
Ahí sí somos un país "privilegiado"

Seriously dudes, it's not even that hot out there, shut the fuck up already.

jueves, 19 de mayo de 2011

Hola, Saira.

Querida Saira de mi vida, veo que sigues siendo igual de pendeja que siempre.

Es increíble lo mucho que tratas de parecerte a mí.
Digo, no te culpo; yo soy tremendamente cool, pero tú no lo eres, cariño, así que deja de intentarlo porque no te queda.

¿Qué crees Saira Saira?
¡Descubrí tu blog!

¿Sabes cómo?
Googlée mi biografía de blogger, y resulta que la tuya se parece un poco. Pero sólo un poco.

¿No me crees?
Mira, me tomé la libertad de hacer una imagen donde salgan nuestros dos perfiles, side by side (eso es lado a lado, en caso de que no sepas inglés, lo cual no me sorprendería ni un poquito):


(Creo que se te olvidó cambiarle el género a algunos artículos. No te juzgo, yo sé que plagiarme debe de ser muy complicado.)


Curioso, ¿no?

¿Sabes qué es más curioso?
Resulta que en tu biografía completa hay otras cosas que se parecen mucho a las de mi biografía, ¡es como si fuéramos almas gemelas!

Mira:


(Por cierto, Saira, tienes que hacer clic en la imagen para que se vea grandota. Te lo digo porque estás tan pendeja que seguro no sabías.)


Anyway, esta vez quise poner imágenes de cómo me robas las cosas que pongo, porque creo que accidentalmente vas a borrar tu blog en los próximos días, como accidentalmente borras todas tus cuentas cuando las descubro y las hago públicas.
No es tu culpa, los accidentes pasan cuando eres una catorceañera con retraso mental a la que nadie quiere ni va a querer porque está bien pinche fea (sí, ya vi tus fotos, cariño)

Me dio mucho gusto descubir tu blog, Saira querida.
Las coincidencias son impresionantes, ¿sabes?

Como por ejemplo, la forma en la que tu blog se llama igual que el Tumblr de mi novia (aunque en tu defensa, cambiaste su nombre por "Saira"), o la forma en la que ---> tu único post <--- es exáctamente igual a ---> mi primer post <--- (la gran coincidencia es que hasta el título es igual), o por ejemplo la forma en la que trataste de copiar hasta el fondo homosexual de mi blog, a pesar de que siempre me quejo de lo homosexual que es.

Así que, mi querida Saira, como siempre, te voy a hacer un gran favor y le voy a hacer publicidad a tu blog, que resulta ser una mala copia del mío. Como todo lo que haces es sólo una muy muy muy mala copia de lo que yo hago.


Lectores imaginarios, por favor visiten:


Seguro su autoestima es tan, pero tan, pero tan baja, que hasta las visitas de burla agradecerá.

Y no olviden dejarle un comentario. Sería grosero que no le dejaran un comentario.


Te amo, Saira.
Cásate conmigo.


EDIT: Y por cierto, Saira, también encontré tu twitter.

(EDIT 2; Ahora que se dio cuenta de que la encontré, ya le puso candadito a su patética cuenta)

Para sorpresa de nadie, también me robas todos mis tuits y mis status de facebook.
Ah, y los de mi novia también.

(Y muchos, muchos, muchos, muchos otros.)

Ay Saira, creo que te voy a dar follow, porque lo que yo escribo es tan genial que quiero volver a verlo unas cuantas horas después, cuando tú lo publiques.

Si tanto te gusta lo que escribo, puedes darme RT. No hay necesidad de que me robes absolutamente todo.
Pero supongo que no serías Saira si tuvieras algo qué decir por ti misma.

Me pregunto qué harás el día en que yo deje de escribir y entonces te quedes sin material...

Tal vez en ese momento decidas tener tu propia vida.
Nah, ¿a quién engaño?, todos sabemos que no eres capaz de tener una vida propia.

Ahora sí, ya me voy.
¡Te amo Saira!




(Mis lectores imaginarios usuales tal vez recuerden a Saira en películas como "Querida Saira" y "Saira de mi vida")

miércoles, 18 de mayo de 2011

It's kind of funny...

Extrañar a alguien es gracioso, ¿no?

Es gracioso como cuando una persona se va, es cuando realmente empezamos a conocerla.
Es como si mientras estuvieran aquí, nuestros ojos estuvieran cerrados; ciegos ante las cosas más evidentes.
Sólo podemos ver su cara, sólo podemos oír su voz, y sólo podemos apreciar sus gestos.

Es hasta que una persona nos deja, que empezamos a darnos cuenta de quién era realmente.

Es gracioso como las cosas que extrañamos, son las cosas en las que nunca prestamos atención mientras todavía podíamos.

Y de repente, varios años después, en un día cualquiera, esas pequeñas cosas regresan de golpe, todas al mismo tiempo.

El viento arrastra esas palabras que alguna vez fueron dichas, como si fueran hojas muertas.
La lluvia empaña las ventanas en las que algún día unos dedos curiosos dibujaron rostros felices.
La Luna ilumina las calles por las que hace mucho tiempo caminó una pareja feliz, tomada de la mano.
El café trae consigo esos olores que en otros tiempos significaban tanto, y que ahora son sólo el sútil aroma de la mezcla de la casa.

Todo llega en un sólo segundo.
Todo llega en el segundo en que el reloj marca las 11:59

Esas 11:59 que hace muchos años hubieran hecho que me dijeras "sobrevivimos otro día" mientras me sonreías con el rostro lleno de sueños.

Y el tiempo pasó.
Y el tiempo sigue pasando.
Y esas cosas graciosas que extrañamos, hacen que lloremos cuando nadie nos ve.

Mientras tanto, el reloj me dice que yo sobreviví otro día.
Otro día sin ti.

domingo, 15 de mayo de 2011

Rebecca Black

Desde hace aproximadamente un mes, la gente se ha divertido mucho odiando a una pobre tipa llamada Rebecca Black, cuyo único delito fue subir un video a YouTube.

El video en cuestión, es de una canción que escribió y grabó. Una canción sumamente mala.
Es realmente pésima.

Sea como sea, si no lo han visto, es de vital importancia que lo hagan ahora.
Al principio podrán odiarme, pero créanme, no es tan malo como parece.



¿Siguen vivos?
Good.

Como se habrán dado cuenta, es una canción sumamente mala.
Algunas personas dicen que puede ser la peor de la historia. Y aquí es donde yo no estoy de acuerdo.

A pesar de que Rebecca Black es MALÍSIMA, me parece exagerado decir que es la peor del mundo.
De hecho, si vemos todas las cosas de las que la gente se queja, resulta que Rebecca Black no es peor que muchos "artistas" de los cuales nadie dice nada malo.

Por ejemplo, la gente se queja del excesivo uso de auto-tune en la canción de Rebecca Black.
Sí, muy cierto, Rebecca Black abusa del auto-tune.
Hmm... si tan sólo pudiéramos encontrar a alguna otra persona famosa que hiciera lo mismo...
Oh, wait!


Para su comodidad, el video empezará justo en la parte MÁS pitera. De nada.

Por alguna razón, la gente que se queja de Rebecca Black, no cuestiona la integridad artística de un grupo TAN apestoso como los Black Eyed Peas.

Hipocresía, much? Yes, I think so too.

La siguiente queja, es que la canción de Rebecca tiene pésima letra.
Cierto, muy cierto.
"Yesterday was Thursday, today it is Friday, tomorrow is Saturday and Sunday comes afterwards" sí es una letra bastante pitera.

Pero al menos tiene letra.
¿Cómo olvidar clásicos (de los cuales nadie se queja) que tienen AÚN peor letra?

Algo así como...



O tal vez como...



¿Lo ven?

Resulta que Rebecca Black no es tan mala después de todo.


No es que yo la defienda porque me guste, lectores imaginarios.
No, de hecho no me gusta ni un poco.

Simplemente digo que si analizamos el estado de la industria de la música en general, Rebecca Black ni siquiera está en uno de los puntos más bajos.
Y eso es realmente triste.


Que ya se acabe el mundo, por favor...


PD: Yo sé que los videos están en tamaño partemadres para mi template, sean hombrecitos y dejen de quejarse.

PD 2: Tuve que soportar mucha música mala para poder establecer mi punto. Si me disculpan, voy a meterme un picahielo en las orejas, y después a echarles thinner.

lunes, 9 de mayo de 2011

Volar

Y en el suelo, se encontraba una pluma blanca, demasiado perfecta para ser de pájaro.
Te agachaste a recogerla y después la pusiste en la palma de tu mano. La miraste con cariño, y después cerraste el puño suavemente.

Tus párpados también se cerraron, tal vez para darle paso a esa impertinente lágrima que se había aparecido de pronto en tus ojos, y que ahora trataba de escapar.
Trataba de escapar cariñosamente, para después bajar por tu mejilla perfecta y morir en tus labios de sonrisa triste.

"Adiós. Vuela.", dijiste en voz baja mientras levantabas tu mano y dejabas que la pluma se fuera.

Tus ojos brillaron como nunca antes los había visto brillar.
Tu sonrisa dejó de ser triste para convertirse en algo hermoso y sincero.
Tu mejilla resplandecía con esa pequella estela que reflejaba los rayos del Sol frío de la mañana.

Y por un momento, pensé que había visto tus alas desplegarse; pensé que en cualquier segundo te pondrías a volar para seguir a esa pluma que ahora flotaba en el aire, cada vez más alto.

Pensé que te irías, de una vez y para siempre, dejando atrás solamente un recuerdo y un rastro de plumas blancas, demasiado perfectas para ser de pájaro.

domingo, 8 de mayo de 2011

Sigo vivo

Sobreviví al narco.

Reporto detalles después, porque estoy en crisis de "mañana tengo revisión de tesis y no voy a terminar"

Cheers.

jueves, 5 de mayo de 2011

Petición de ayuda.

Señores y señoritas.
Galanes y niñas bonitas.

El siguiente mensaje es llevado a ustedes por el Ninja Peruano.
Esto no es un simulacro.



Mañana me les voy a Morelia.
Decidí tomarme unas muy merecidas vacaciones e ir a chelear a pastos más verdes.

Sin embargo, los medios de comunicación de este hermoso país, me han dado la idea de que Morelia es un lugar sumamente peligroso, donde los Zetas y los narcos sólo esperan mi llegada para entonces poder balacearme, cortarme la cabeza, pedirle dinero a mis padres (dinero que no darán porque ni lo tienen ni les interesa recuperarme) y después violar mi cadaver y mi memoria.

No creo que todos esos rumores sean ciertos.

PERO...

Pero uno nunca sabe.

Es por eso, lectores imaginarios, que les aviso que mañana me voy a Morelia, y que en teoría regreso el domingo.

Si pasado ese tiempo, ustedes no saben de mí, contacten a las autoridades pertinentes (que, lamentablemente, son los inútiles policías de este pitero país) y pídanles que me rescaten, porque soy muy guapo como para ser narcoasesinado.

Y si ya me morí, venguen mi muerte, maldita sea.

Gracias, lectores imaginarios.



PD: Si salgo vivo del narconido que los medios dicen que Morelia es, prometo traerles hartas historias de mis desventuras morelianas con bienaventuradas morelianas que tengan la aventura de conocerme.




- Fin de la transmisión -

martes, 3 de mayo de 2011

Give me civilization or give me death

Hace unos cuantos días, una amiga me invitó a ir con ella a acampar el fin de semana.
Arrugué mi frente e hice un ruido desaprobatorio.

No consciente de que yo ya le había puesto punto final al asunto, ella siguió tratando de convencerme.
Me dijo que era como una montaña, y que estaba muy chido porque la naturaleza y los animales y así.

Arrugué mi frente en forma aún más rugosa, y después dije "hueva"

Mi amiga pasó los siguientes quince minutos hablandome de las maravillas de acampar, de cómo rejuvenece tu alma, de lo magnífico que es para el cuerpo, del sentido de aventura, y de todas esas cosas que la gente amante de la naturaleza considera que son argumentos válidos, cuando es más que obvio que no lo son.

"Meh", le dije.

"Ahora que lo pienso, nunca te he oído decir que te guste acampar...", me contestó, pensativa.
"¿Crees que tenga algo que ver con el hecho de que no me gusta acampar?", respondí.

Fue como si hubiera clavado una espada en su corazón, o un pepino en su culo.
Sus ojos se abrieron como platos, y se llevó las manos a la boca.
Aparentemente, yo había dicho algo que no debía.

En un pitch muy agudo, me preguntó que cómo era posible que no me gustara, si acampar era lo mejor del universo.
Para resumirles todo el choro en una simple metáfora, me dijo que acampar era mejor que tener sexo con dos supermodelos suecas encima de la tumba de tu suegra el día en que te enteraste que acababas de ganar la lotería.

"Sí, me imagino que acampar tiene sus cosas buenas", dije mientras veía interesado una hoja que estaba cayendo cerca de mí.

Gran error.
Los siguientes 10 minutos fueron dedicados a escuchar a mi amiga enlistando todas las cosas buenas que tiene el acampar.
La lista era más grande que la de los muertos en la guerra contra el narcotráfico.

"Qué lindo..." dije cuando ella terminó.
Llevaba 5 minutos haciendo garabatos en una servilleta.

"Bueno, y entonces, ¿por qué no te gusta acampar?", inquirió mi amiga.

"Es simple. Es una de esas políticas de la empresa"
"¿Cuál empresa?"
"La empresa de Dexter y coasociados.", dije

Ella se me quedó viendo, esperando que le dijera a qué me refería.
Evidentemente, no dije nada. Yo no digo nada hasta que me lo pregunten específicamente.

Silencio.

"¿Cuál es la política de la empresa?", me preguntó por fin.

"Dexter no caga en un árbol. Dexter no caga en unos matorrales. Dexter no caga en la tierra. Dexter no caga en ningún lugar que no sea un baño limpio."

Y es que en serio, lectores imaginarios: ¿cuál es la obsesión de la gente por tener que cagar en los árboles, y tener que limpiarte con hojas?
¿Por qué alguien querría hacer eso?

Puedo entender que, por alguna estúpida razón, quieran pasar varios días sin luz y sin internet.
Digo, a lo mejor es alguna clase de instinto salvaje que guardan en su interior.

Puedo entender que quieran dormir en un sleeping bag de 2 cm de grueso, en lugar de una cómoda cama blandita y con soporte ortopédico.
No sé, a lo mejor les gusta la sensación del duro suelo, combinada con los bichos que se te suben a la cara.

Hasta puedo entender que les guste caminar, y escalar, y brincar, y todas esas actividades físicas que la vida moderna ha hecho inútiles, gracias a Dios.
Hay personas para todo, creo.

Lo que no capto, es que quieran ir a un lugar sin drenaje; todo insalubre y puerco.

No. No señor. Mis hermosas nalgas no tendrán que ser limpiadas por hojas rasposas que puedan resultar ser hiedra venenosa.

Este culito se queda en su cómodo bañito.

Acampar no es para mí.

Denme civilización o denme la muerte.
De todos modos, si me dejan varado en el bosque, o la montaña, o loquesea; de todos modos voy a acabar muerto.
Así de inútil soy.